La vitamina F restaura la barrera natural de la piel, además de hidratar, reducir las rojeces y el exceso de sebo, aportando hidratación que necesita la piel, además potencia la luminosidad del rostro con un efecto ‘flash’, permite lucir una piel radiante.
¿Sabías que la vitamina F no es realmente una vitamina?
La vitamina F está considerada una vitamina, porque actúa como una vitamina y tiene las mismas propiedades que una vitamina, en este caso, la vitamina F tiene las mismas propiedades que el omega 5 y el omega 6.
Entonces, podemos decir que, la vitamina F es en realidad un conjunto de ácidos grasos poliinsaturados, conocidos como omega-3 y en omega-6.
Carencia
Cómo reconocer la carencia de la vitamina F en nuestro organismo, y qué hacer ante esta situación:
- Reacciones alérgicas.
- Espinillas en la piel.
- Sequedad de la piel.
- Bajo rendimiento.
Para evitar la deficiencia de esta vitamina, debemos consumir alimentos ricos en Omega 3 y Omega 6; siendo la vitamina F un conjunto de ácidos grasos, que nuestro cuerpo no produce, debemos incluirlo en nuestra dieta diaria, podemos encontrar en:
- Los aceites vegetales, como los de oliva, soja, de lino, de maíz, de girasol o de nuez.
- También lo encontramos en pescados azules como el salmón, las caballas, las sardinas o el atún.
- Podemos encontrar grandes cantidades en frutos secos como nueces, almendras y cacahuetes; y
- Semillas como la de girasol o de lino.
Exceso
Por otra parte, aunque dicen que es algo raro tener exceso de esta vitamina, en caso que suceda, lo podemos determinar de la siguiente forma:
- Reacciones alérgicas.
- Dolores de estomacales.
La vitamina F el abrigo de la piel
Por otra parte, la Vitamina F, está considerada por médicos y nutricionistas como la clave definitiva para defender la piel contra el envejecimiento, se conoce también como «el abrigo de la piel«.
Beneficios
Por otra parte, es importante destacar, que la vitamina F tienen múltiples funciones, entre las que destacan:
- Participa en el transporte de oxígeno por la sangre.
- Regula el índice de coagulación sanguínea.
- Dispersa el colesterol depositado en las venas.
- Induce una actividad hormonal normal.
- Nutre todas las células de la piel.
Por otra parte, la vitamina F
- Mejora los problemas asociados al envejecimiento.
- Normaliza la presión arterial.
- Contribuye a tener un envejecimiento saludable.
- Ayuda al crecimiento del cabello.
- Ayuda al cuerpo a metabolizar mejor los alimentos.
- Se la relaciona también con el buen funcionamiento del cerebro.
- Fortalece el sistema nervioso.
- Combate los nervios, infecciones y alergias.
- Ayuda a disminuir los dolores menstruales y premenstruales.
- Mejora la artritis reumatoide, arterosclerosis, entre otros.
En el mundo de la cosmética, los productos con vitamina F contribuyen
- A mantener una piel nutrida, hidratada.
- A reducir la formación de arrugas y manchas.
Consume alimentos ricos en vitamina F
1. Pescados grasos
Los pescados que tienen un mayor contenido en grasa, se denominan popularmente azules.
El contenido en grasa de estos pescados puede alcanzar hasta el 10%, según las especies. Por ejemplo, la sardina alcanza según la temporada entre un 8 y 10%, y esta grasa se almacena debajo de la piel y en la carne oscura del pescado.
También pertenecen a este grupo los siguientes pescados: boquerón, caballa, palometa, chicharro, atún, bonito del norte, salmón, anguila y pez espada.
La grasa del pescado azul es rica en ácidos grasos poliinsaturados o ácidos grasos omega 3, que disminuyen los lípidos, incluido el colesterol, y por tanto reducen el riesgo de que éste se acumule en las arterias.
2. Aceites vegetales
El aceite vegetal es un compuesto orgánico obtenido a partir de semillas u otras partes de las plantas. Está compuesto por lípidos; es decir, ácidos grasos de diferentes tipos.
Aporta al organismo una variedad de vitaminas, antioxidantes y grasas benéficas, mejores para el corazón que las grasas sólidas como la manteca o mantequilla.
3. Frutos secos y semillas
Los frutos secos y semillas son un componente importante de una alimentación saludable. Son nutricionalmente importantes: reducen el colesterol; promueve la circulación; minerales, como potasio, calcio, magnesio, y selenio; y antioxidantes, incluyendo el resveratrol, flavonoides, tocoferoles (vitamina E), y los carotenoides.