Los antisépticos son sustancias que se aplican sobre tejidos con vida, con el objeto de matar o impedir el desarrollo de los microorganismos.
Los antisépticos
De acuerdo con su origen etimológico, un antiséptico es un agente que impide la sepsis o putrefacción de los tejidos vivos.
Por este motivo se emplean tópicamente en la prevención o tratamiento de infecciones en las heridas o quemaduras.
- Entonces, el objeto de los antisépticos es por una parte prevenir la sepsis de los tejidos lesionados
- Y, también, para evitar posibles infecciones en una intervención quirúrgica.
Por otra parte, los antisépticos actúan sobre la piel y las membranas mucosas a concentraciones que no comprometen la integridad de las células de los tejidos vivos.
Es decir,
- El producto no debe ser absorbido por la piel o las mucosas.
- Ni presentar efectos tóxicos localmente.
Además, un antiséptico debe actuar rápidamente y poseer un amplio espectro de acción que garantice la eliminación:
- Tanto de bacterias grampositivas y gramnegativas.
- Como de hongos o virus.
Los antisépticos pueden ser las mismas sustancias que las utilizadas para desinfectar, pero en concentraciones más bajas.
Asimismo, los antisépticos no deben usarse para desinfectar materiales inertes, tales como:
- Instrumentos médicos.
- Las pinzas.
- También las tijeras.
- Los bisturís.
- Y, los guantes.
Factores influyentes
En primer lugar, su potencia depende de la concentración del agente y del tiempo de actuación.
Asimismo, al aumentar la temperatura aumenta la acción desinfectante.
Además, el pH es otro valor a tener en cuenta, ya que las formas ionizadas de los agentes disociables son más efectivas al pasar mejor a través de las membranas biológicas:
- Los agentes aniónicos son más activos a ph ácido.
- Y los catiónicos a ph alcalino.
Además, la presencia de residuos orgánicos en el suero, la sangre, o el pus puede dificultar la acción antiséptica de estos productos.
Deferencias entre antisépticos y desinfectantes
Por lo general se tiende a confundir los antisépticos y los desinfectantes, sin embargo, existen grandes diferencias entre ellas, por ejemplo:
En primer lugar los desinfectantes son sustancias que se emplean para destruir los microorganismos o inhibir su desarrollo.
Los antisépticos impiden el desarrollo de microorganismos
Además, los desinfectantes ejercen su acción sobre una superficie inerte u objeto inanimado.
Por su parte, los antisépticos actúan sobre tejidos vivos.
Los desinfectantes se usan a concentraciones que pueden tener efectos tóxicos o irritantes sobre los organismos vivos; por ello, se utilizan sobre materiales y no deben emplearse sobre la piel o mucosas.
Los desinfectantes también se aplican sobre objetos para evitar su infección.